El parque de la Quinta de los Molinos, en el distrito de San Blas (metro Suanzes, opción muy cómoda, pues la parada está en la puerta del parque) es una opción muy recomendable en primavera. Este parque tiene una extensión de 25 hectáreas, con grandes extensiones de arbolado. Lo más característico son los almendros (hay casi 1.500), que florecen en febrero-marzo, y ofrecen un espectáculo fantástico. Este año, como se ha adelantado la primavera, los almendros ya han florecido.
Este jardín fue propiedad del conde de Torre Arias. En el año 1920 lo regala al arquitecto alicantino César Cort Botí, que era profesor de Urbanismo en la Escuela de Arquitectura, así como concejal del Ayuntamiento. Este construyó un jardín de tipo mediterráneo. A su muerte, el parque se quedó muy abandonado. En septiembre de 1980 y tras un convenio con la Gerencia Municipal de Urbanismo, se cede al Ayuntamiento tres cuartas partes de las 28,7 hectáreas de la propiedad original, permitiendo que el resto del parque fuera de uso residencial.
El parque está recorrido por multitud de caminos de tierra, además de por un camino pavimentado, bordeado por grandes plátanos, que lleva desde la entrada principal, en la calle Alcalá, hasta el palacete de estilo racionalista, construido a principios del s.XX. Cerca del palacete podemos encontrar zonas de jardín con flores y extensiones de césped. También podemos encontrar un estanque, un molino y el edificio conocido como "Casa del Reloj".
Lo que procede en este entorno tan especial es quedar con amigos y hacer un picnic. Fuera del parque hay unas zonas infantiles donde se puede ir a jugar después del picnic y del paseo por el interior de la Quinta de los Molinos.
2 comentarios:
Que ya están los almendros en flor!!!...
bss
Se nos ha pasado la fecha; este fin de semana ya no quedará ni un almendro con florecitas... Tenemos que hacer picnic el año próximo!
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