Ya os comenté en una entrada anterior un posible viaje a La Mancha a ver los molinos de viento. Os puse en la entrada también el vídeo de 4 min y medio en el que Don Quijote luchaba contra los "gigantes", que a los pequeños les hace muchísima gracia.
Ayer estuvimos haciendo una visita a los molinos de viento, y por eso quería contaros algún detalle más o sugeriros qué hacer. Ojo, es zona de mucho viento; abrigad bien a los pequeños.
Consuegra es un pueblo que está a 136 km de Madrid, por la carretera A4. Cuando nos salimos de la carretera y entramos en Consuegra, hay que seguir las indicaciones de "Molinos-Castillo" y en seguida llegaremos a una zona de parking donde podemos dejar el coche para dar un paseo. Hay parking también al lado del castillo, por lo que podemos apurar un poco más si vamos con niños más pequeños, y subir algo más la montañita.
Al dejar el coche el paisaje que encontramos es muy bonito: 10 molinos de viento y un castillo del siglo XI entre los molinos, que está muy bien conservado (es uno de los castillos mejor conservados de España).
Después de dar un paseo entre los molinos (alguno se puede visitar por dentro, y en uno de ellos está la Oficina de Turismo de Consuegra), nos metimos en el castillo. Os recomiendo totalmente que toméis la opción de la visita teatralizada. Estas visitas, que duran entre 1h 15 min y 1h 30 min, tienen lugar a las 13 horas. Las entradas cuestan 8 euros para adulto y son gratis para niños.
Para más información sobre estas visitas pinchad aquí o llamad al 925 475 731 (o email: ofturismo@aytoconsuegra.es)
La historia del castillo nos la cuenta un juglar, y nos lleva por distintas estancias. Aparece un monje, el maese constructor, Doña Leonor, .... En un momento dado, nos enseñan a luchar con espadas de madera, que es muy divertido para niños y mayores. Luego aparece el rey Don Rodrigo (hijo del Cid), las intrigas de la Corte.... Está muy bien hecho. Los actores ponen una energía muy especial, y tanto niños como mayores lo pasan genial en esta visita.
Tened en cuenta que al acabar a las dos y media lo mejor es buscar un restaurante por Consuegra para comer. Nosotros fuimos a Alcázar de San Juan a comer (al restaurante La Tinaja), pero está a unos 35 min, por lo que la comida empezó un poco tarde para los niños. Eso sí, antes de entrar en el castillo compramos a los pequeños unas patatas en uno de los molinos, y así aguantaron mejor el embite del hambre.
Espero que disfrutéis de molinos y castillo, y que los niños tengan un día en el que su imaginación vuele.
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